La Policía de Monclova logró capturar a un inusual dúo del crimen: un muñeco "Chucky" y su dueño.

El hombre, orquestaba robos utilizando al juguete para sembrar el terror en la ciudad de Coahuila, México. Según las autoridades, empleaba al perturbador muñeco mientras se hallaba bajo la influencia de sustancias ilícitas, abordando a transeúntes en la plaza pública. Con una réplica de un cuchillo real en mano, exigía dinero a aquellos que se cruzaban en su camino.

Sin embargo, la maniobra no pasó desapercibida para las autoridades locales, quienes procedieron a esposar tanto al individuo como a su macabro cómplice de plástico. Ambos fueron arrestados por alterar el orden público y poner en peligro a los ciudadanos.

Según medios locales, la oficial encargada del arresto tomó la decisión inusual de colocar esposas al muñeco ante la insistencia de la población, sin embargo, esta acción le costó una sanción por parte de sus superiores.

El imputado, por su parte, fue conducido a las celdas municipales, donde cumplió con su respectiva sanción. Posteriormente, fue liberado, dejando tras de sí un rastro de perplejidad y asombro entre los habitantes de la ciudad.

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