Perdió la visión del ojo izquierdo y ahora solo podrá recuperarla si acepta un trasplante de córnea.

Esta es la trágica historia de la mujer que perdió la visión de un ojo en una piscina pública de la ciudad de Londres. Lo que comenzó como una sesión deportiva, pronto se convirtió en una pesadilla que cambió la vida de la mujer.

Shereen-Fay Griffin, una asistente de escuela inglesa de 38 años amante de la natación, visitó una piscina de un centro de ocio de su comunidad en agosto del 2022. Un par de días después, empezó a presentar picazón y dolor en el ojo izquierdo, por lo cual decidió acudir donde un especialista.

La mujer comentó que el oftalmólogo le recetó gotas antibióticas para los ojos y esteroides por lo que creía que era un herpes simple. Sin embargo, esto no parecía estar haciendo mucho por ella.

Tras una consulta con un equipo médico de un hospital privado de Londres, este diagnosticó que Griffin tenía una queratitis por la ameba Acanthamoeba.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la queratitis por Acanthamoeba es una infección ocular rara, pero grave, que puede provocar discapacidad visual permanente o ceguera, ya que la ameba que lo causa afecta directamente la córnea.

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